Via verde Mostoles-Almorox

El pasado domingo los amigos de SurBike (<- pinchar en el enlace para ir a su página) nos propusieron ir con ellos a realizar la Vía Verde del Guadarrama.

En principio pensaron hacerla de ida y vuelta, pero al final dejamos una furgoneta en Almorox el día anterior para volver desde allí, debido a que podían ser demasiados kilómetros (122km. ida y vuelta)

La realidad fué otra debido a unos cuantos problemillas que encontramos, y que hicieron que tan solo la ida se alargase hasta los 71 kilómetros que marcó mi cuentakilómetros al final, a pesar de que el track sacado de internet marcaba 58.

Aproximadamente a las 9 de la mañana nos juntamos todo el grupo en la estación de Mostoles El Soto para iniciar el recorrido. Un par de personas, Manu y Alberto, llevaban el track del recorrido cargado en sus GPS e intentamos en todo momento seguirlo, pero como veríamos más adelante, eso fué harto difícil.

Salimos de Móstoles dirección Almorox por la Via Verde.

 

Aproximadamente unos 45 minutos más tarde paramos en una fuente para quitarnos algo de ropa, que ya empezaba a pegar el sol.

Continuamos camino por la via verde. Se podía avanzar perfectamente y con tranquilidad por ella, así que pronto (en menos de una hora y media) llegamos a Navalcarnero, en donde paramos 5 minutos a tomar una barrita de cereales, mientras otros iban a comprar pilas para el walkie talkie.

 A la salida del pueblo esperamos que volvieran con las pilas.

Una vez todos reagrupados, continuamos por el camino, aunque a veces no estaba del todo claro por dónde seguía. La mañana, expléndida, aunque en las horas tempranas si te parabas, una ligera brisa refrescaba el ambiente.

Durante el camino íbamos encontrando los mojones que nos indicaban que circulábamos en la dirección correcta.

Los anchos caminos nos dejaban avanzar con comodidad en medio de la vegetación.

Por la zona de Villamanta comenzaron los problemas que nos retrasaron e hicieron que perdieramos el camino. Algunos dueños de parcelas se han adueñado del tramo de via verde que pasa por su tierra, y tuvimos que abrir alguna alambrada para poder pasar.
Llevábamos unos 33 kilómetros y más de 3 horas de camino, aunque no siempre pedaleando.

Aquella valla que abrimos, la volvimos a cerrar una vez habíamos pasado tod@s.

Sin embargo, esta otra alambrada estaba demasiado bién construida y aunque podríamos haberla cortado, luego se quedaría abierta, así que la dejamos. Algunos nos fuimos con ganas de haber continuado por la vía verde, que se vé tras la alambrada.

Esto nos obligó a buscar otro camino, lo que nos hizo perdernos y perder mucho tiempo.

Arenales y caminos imposibles...

Al final salimos a la carretera para avanzar a otro punto en donde poder retomar nuestro camino.
¡El buén humor a pesar de las dificultades no puede faltar nunca!

Salimos de la carretera por la izquierda, volviendo a coger un camino que nos llevaría al siguiente punto en donde nos detendríamos. ¡Ya hacía calor de verdad!

Paramos en la Virgen de la Poveda de Villa del Prado a tomar otra barrita e ir al servicio algunas mientras otros miraban el "jepe-ese" para comprobar por donde había que continuar.

Tras la subida que había a la salida de la zona de descanso, el camino volvía a tener tramos bastante agradables para circular, con llanos largos y rectos por los cuales podíamos coger algo de velocidad.
Tras salir de la Comunidad de Madrid y entrar en Castilla La Mancha, concretamente en Toledo, nos detuvimos de nuevo ya que el camino no aparecía porque estaba nuevamente... ¡VALLADO!
Cuando nos detuvimos bajo un arbol a repasar el "jepe-ese" se nos acercó un perro...¿elefante? jajaja, ¡era enoorme!

Aquí nos encontrábamos al lado de unos secaderos de tabaco.

Tuvimos que volver atrás a la Comunidad de Madrid de nuevo y atravesar la urbanización Las Hoyas, en donde preguntamo y nos indicaron bastante bién el camino para llegar a Almorox. Todo recto y al llegar a la raqueta, el camino que sale de frente, tras la valla. Este era el camino..

... y por ahí llegamos a la "raqueta", un ensanchamiento de la carretera como una rotonda con una sola entrada y salida, la que se vé al fondo y por la que nosotros llegamos.

Pasando por la valla de al lado tranquilamente...

Entramos en el bosque, el cual tenía unas cuantas subidas y bajadas de apretar los dientes, hasta que por fin salimos de él y nos reagrupamos.

Y por fí, allá al fondo.. ¡ALMOROX!

Al ver el pueblo ya todos los males desaparecieron y empezamos a pensar en nuestra bien merecida recompensa tras esta larga y bonita ruta, ¡La Cerveza!
Llegamos al pueblo a eso de las 15:30, 6 horas y média después de salir de Móstoles y tras haber realizado toda la vía verde y superado un montón de problemas y desvíos gracias a las vallas de esos que se añaden terrenos por la cara. Dejamos las bicis en la furgoneta y pasamos al bar a recoger nuestro premio por la ruta relizada. A eso de las 16:45 nos fuimos, ya que el bus de vuelta salía a las 16:50.

La ruta ha sido muy interesante y entretenida. Ha tenido algo de dureza, quizás un poquito mas de la que esperábamos todos por culpa de los contínuos desvios y cambios de camino, pero ha resultado genial.
Para otra ocasión, ya tenemos una idea mejor de por dónde hacerla y así evitar los problemas con las fincas.
Agradecer a Surbike que hayan contado con nosotros en esta ocasión, y esperando volver a coincidir pronto. os mandamos un fuerte abrazo.
¡Gracias a tod@s!
Casus Iter.